Si hoy te propusiera una adivinanza y la pregunta fuera: ¿quién fue el primer ex-Beatle en lograr un número uno tras la disolución de la banda en abril de 1970? sin duda, pensarías en alguno del tándem Lennon-McCartney.- Hmmm-, dirías,- tal vez una canción poderosa y reflexiva de letra revolucionaria o anti belicista de John Lennon, o un sencillo lleno de melodiosa y bien construida música, con la elegancia sensible de Paul McCartney-.
Y entonces, la historia saldría a tu encuentro para mostrarte que de ninguna manera fue así. El así llamado «The quiet Beatle» (el Beatle tranquilo), el más joven del grupo, llevó arriba de las listas su primer sencillo del que se consideraría su primer álbum en solitario, «All things must pass», el primer triple álbum genuino producido por un artista (hay que decir que cuando todavía estaba en su época Beatle había ya producido dos discos en solitario). Dicho disco también ascendería como un cohete al primer puesto de las listas Billboard, lugar de honor que ocuparía durante siete semanas consecutivas.
¿Sorprendido? Pues esta es tan solo la punta del iceberg. Harrison permanecería como ese cuerpo de iceberg, sumergido y escondido a base de bien desde que entrara a formar parte del más famoso cuarteto de la historia. Cegado por el resplandor del talento inconmensurable y del también inconmensurable ego de sus dos compañeros de batallas, a Harrison le costó hacerse un hueco dentro de los discos de su banda de Liverpool para poder dar a conocer su material. Una vez que Harrison decidió comenzar a escribir canciones más en serio, siempre se encontraba con problemas respecto a la inclusión de las mismas en los discos, no solo por el dúo creativo del grupo por antonomasia, sino también por el mismísimo George Martin, su tocayo, el productor de casi todos los vinilos de la banda. Sea como fuere, esto le permitió a George acumular una cantidad ingente de material, guardando a buen recaudo un número descomunal de canciones hasta la disolución del cuarteto de Liverpool.
Y no es ésta sino tan solo una de las facetas de George que asombran a quien se asoma un poco a descubrir su grandeza. Puesto que además tenía esa cualidad alternativa en su esencia al eterno poderío y sacrosanto eje sobre todo lo relativo a la manzanita de Lennon y McCartney, ofreciendo siempre mundos nuevos, tanto dentro de los Beatles como fuera de ellos.
Se da una cualidad de búsqueda espiritual que acompañaría a George durante una buena parte de su vida y que se convertiría en leit motiv de su creatividad y de su vida.
Su interés por el hinduismo y el budismo, su introducción en la música popular del sitar, instrumento cuyos rudimentos aprendió junto al mismísimo Ravi Shankar, a la vez que un profundo interés en cualquier filosofía ancestral, le llevaron a ser también presentado como un místico. Vamos a rescatar ese primer gran éxito de George llamado My sweet Lord, que creo ilustra a la perfección esta faceta suya que dominaría toda su obra. Aunque veremos que es apenas una cara de las muchas dentro de ese maravillos kaleidoscopio que encarnaba.
Es algo muy de Harrison el crear canciones a lo mantra, esta delicia que parece un himno al Señor con sus distintos nombres, muestra ese patrón repetitivo dirigido a «mi dulce Señor», que evoluciona cuando dice: «te quiero ver, te quiero ver, realmente te quiero ver, pero lleva tanto tiempo, mi Señor, realmente te quiero conocer, ir contigo, mostrarte, Señor, que no llevará mucho tiempo». Y mientras tanto, los coros por detrás alternan entre el Aleluya cristiano, y el Hare Krishna, Hare Rama, Gurur Brahma, Gurur Vishnu, Guru devo Maheshwara, Guru sakshat, param Brahma, tasmai shri guravay namah, de los hindues. Me parece una canción llena de vibrante energía en un homenaje de George a esa presencia de Dios que parecía sentir con tanta devoción. De hecho, Guru quiere decir «el que está más allá de todos los atributos y formas y que no es otro que el Ser Supremo (el Brahman) que reside dentro de cada uno de nosotros». Según este mantra, solamente Dios puede ser mirado como UNO, que es más alla de atributos y formas. Os pongo el link del cual obtuve esa info curiosa sobre el mantra Gurur Brahma Gurur Vishnuhu Guru Devo Maheswaraha Guru Saakshaat Parabhrahma Tasmai Sri Gurave Namaha. Eso sí, está en English, si alguien no lo entiende, me decís en comentarios. Esa guitarra rítmica que se adueña de toda la canción comienza sencilla y sin aditamentos, para luego incorporar cada vez más texturas instrumentales y vocales en un perfecto avance sin brechas hacia el clímax.
¿Qué te parece esta oda espiritual humilde y sencilla?
Tal y como comentaba más arriba, no solo la religiosidad y la profunda búsqueda espiritual definían la persona de George, sino un sentido del humor del que podemos participar viéndonos tal vez reflejados en el siguiente vídeo. La canción fue inspirada por el encuentro de George con un tal George Grief, el cual le recordó a un cómico al que admiraba, llamado Lord Buckley. George así se lo comentó y, «casualidades» de la vida, resultó ser que ese hombre había sido su manager e invitó a George a conocer a Lord Buckley a Los Ángeles. El hogar del cómico se llamaba «Crackerbox Palace» y a George le pareció tan inspirador que lo anotó en un paquete de cigarrilos y después compuso la canción. Incluso incluyó al tal Grief en la letra y una frase célebre del cómico Buckley: «Sabed que el Señor está bien y dentro de vosotros».
A mí al menos me resulta fácil entrar en el imaginario de George, en esta canción que nos muestra musicalmente ese toque suyo, con ritmos tipo reggae y una guitarra nítida y cristalina. Las escenas de un posible camino vital en un vídeo que contiene precisamente mucho humor, y un guiño a la propia vida en su eterna dicotomía: » a veces es bueno, a veces es malo»o «no se salga usted del camino trazado o le deportaremos». Me llama la atención todo el vídeo, desde el sorprendente comienzo que no te voy a desvelar, cuando George «nace», donde dice: «cuando nací era tan joven…», un recibimiento con mascarillas (ojo al dato), ¡he flipado al darme cuenta!, pasando por su adolescencia y hasta una escena final con toda la troupe de personajes y vivencias, y que si os fijáis parece la loca hora del té del sombrerero loco de Alicia en el país de las maravillas, de Lewis Carroll. Y en qué preciosa casa con jardín vivió George, la verdad es que me encanta. Ya me dirás cuál es tu personaje favorito, a mí me encanta la niñera de George, que por cierto es interpretada por el cómico Neil Innes, y los duendes que bailan sobre los guijarros del estanque:) El vídeo está dirigido por Eric Idle, de los Monty Python, que era además un amigo cercano de George. ¡Menudo plantel!
Era tan joven cuando nací, mis ojos aún no podían ver, y para el momento de mi primer amanecer alguien me abrazó. Me dijeron: Le doy la bienvenida a Crackerbox Palace, le hemos estado esperando. Usted trae tanta alegría a Crackerbox Palace, no importa donde usted vague, sepa que nuestro amor es verdadero.
Mientras creces o tratas de hacerlo, sin saber por dónde empezar, busqué a alguien que pudiera ayudar a revelar mi corazón – alguien dijo: mientras eres parte de Cracerbox Palace, haz lo que hacen los demás, o enfrenta el hecho de que Crackerbox Palace puede que no tenga otra opción que deportarte. Le damos la bienvenida a Crackerbox Palace, le hemos estado esperando. Nos traes tanta alegría en Crackerbox Palace, no importa donde vague, sepa que nuestro amor es verdadero.
Algunos tiempos son buenos, otros son malos. Eso es parte de la vida.
Y de pie, entre todos ellos, conocí a un Sr. Grief, y me dijo: le doy la bienvenida a Crackerbox Palace, no le esperábamos. Vamos a rapear y tocar en Crackerbox Palace.
Sabed que el Señor está bien y dentro de vosotros
¿Cuál es probablemente la canción más conocida de la etapa Beatle de George? Podríamos dudar entre varias joyas, siendo una de las que brillan con más fulgor, su himno al sol, Here comes the sun. Pues bien, nuestro dulce George, en su eterna meditación y amor por la milenaria filosofía china, recuperó a la contraparte del sol en relación a nuestro planeta la Tierra, para cerrar el círculo y crear así una armonía yin-yang. Bendita obsesión. En clara alusión a su Here comes the sun, aquí nuestra penúltima canción de hoy Here comes the moon, relajante y hermosa a partes iguales. Ya escuchando las sonoridades envolventes y ese halo de sitar en segundo plano, sabemos que lo que llega puede cautivar hasta al amante de la luna por excelencia: Pierrot. Encontramos de nuevo esa insistencia a lo mantra con el estribillo, puede ayudar a serenar el ánimo en una noche que sigue a un día de esos que son movidillos.
Todo el mundo está hablando por los codos, actúan como si no la notaran, pero aquí está y aquí viene: aqui viene la luna, la luna, la luna, la luna. Oh, sí. El impulso siempre se acelera cuando está llena, mientras me hace girar la cabeza a mi alrededor, sí, lo hace, y aquí viene: aquí viene la luna, la luna, la luna, la luna, la luna. El regalo de Dios veo que se está moviendo allá arriba en la noche. Aunque oscuro, el espejo en el cielo nos refleja nuestra luz. Parece una pequeña hermanita del sol o madre de las estrellas por la noche. Y aquí está y aquí viene. Aquí viene la luna, la luna, la luna, la luna, la luna. Siempre te deja sin respiración cuando es nueva, se destaca sobre las lunas a su alrededor, sí, y aquí viene: aquí viene la luna, la luna, la luna, la luna.
Bueno, pues llegamos al final…del post. Porque tiene que haber más George, ¿no crees? Falta, por supuesto, y soy muy consciente de ello, la historia prometida que hay detrás de While my guitar gently weeps, y también algunas colaboraciones estelares de George junto a otros artistas y alguna que otra sorpresa más que de momento no voy a revelar aunque de seguro conoces aunque sea de manera anecdótica, y que augura que pasaremos una tarde bonita llena de pensamientos, palabras y notas esculpidas por el cincel de un artista intensamente místico. ¿Su complemento? Un molde humano-divino, repleto de infinidad de formas.
Y haciendo honor a esto último, vamos a dar ya por concluida nuestro encuentro con George Harrison, (qué buenas compañías para estos días invernales), con una canción que refleja una preocupación que yo misma vengo experimentando de un tiempo a esta parte. Tú me puedes ofrecer tal vez tu visión al respecto en los comentarios, a ver si entre todos nos aclaramos. Venimos asistiendo a una serie de censuras en las redes sociales: twitter, y vídeos de Youtube sobre todo, donde las personas titulares de la cuenta son objeto de cortes, a modo de «antiguamente» en las películas o en plan NODO, en una parte o en la totalidad de los twits o vídeos publicados. Supongo que también tendrá lugar en otras redes sociales, como Facebook o Instagram, pero me remito a aquello de lo que tengo conocimiento. Los motivos para justificar tales vetos suelen ser que tal o cual idea o información «puede confundir o alentar» comportamientos no deseados, o directa y llanamente por desviarse del discurso oficial imperante a nivel de los principales organismos o instituciones estatales, dentro y fuera de España. ¿Qué te parece todo esto? Yo, sinceramente, creo que estamos llegando ya a unos límites que si continúan traspasándose, nos van a poner en una situación verdaderamente incómoda; este tipo de procedimientos están claramente destinados a que nadie se salga del redil. Eso sí que es amputar la libertad de expresión. Este tipo de libertades no podemos permitirnos el lujo de contemplar indiferentes cómo son mutiladas impunemente. Creo que es histórico, la web ha implicado siempre «libertad de expresión»; lo grande de la web en sus comienzos y hasta el momento presente, es esa red que se genera de distintos puntos de vista a nivel mundial, además de comenzar a ser a su vez repositorio de conocimiento con las bibliotecas y bases de datos cada vez más actualizadas. Y no sólo eso, también nos sirve como vehículo de lo que podemos ofrecer a otros, siendo a veces ideas, otras veces objetos, o información muy valiosa hasta para tu salud.
La cuenta de La reunión secreta (canal alternativo de información sobre la Covid, que reune cada semana a expertos a nivel mundial) en Youtube , sufrió la censura el pasado viernes de un vídeo completo, llamado «Los papeles de la vergüenza II», donde se mostraba un documento publicado por el Ministerio de Sanidad de España, en referencia al protocolo que se instauraría al respecto de una pandemia de gripe, si es que se diera la contingencia; este documento fue redactado durante el gobierno de Zapatero. Nada de lo recogido en los presupuestos del documento se ejecutó cuando llegó la Covid, por supuesto. El vídeo es censurado ahora, y así ha sucedido y sucederá con vídeos y canales enteros. La propia Youtube mandaba un mensaje al canal, alegando que el vídeo ponía en entredicho a la OMS, y que fomentaba el rechazo al uso de la mascarilla en la población. Grave es que se censure, más grave es que sea debido a tal o cual algoritmo de Youtube, que detecta contenidos o palabras, y sorprendentemente lanza una acusación falsa que no tiene nada que ver con el contenido del vídeo en particular ni del canal en general. El equipo de La Reunión Secreta ha defendido, y así lo sigue haciendo, el uso de la mascarilla desde sus primeros vídeos, allá por el mes de marzo, cuando «no hacían falta».
A título póstumo, fue publicado un álbum de George Harrison titulado Brainwashed (Lavado de cerebro), y me parece que nos puede ofrecer una o dos pinceladas sobre lo que está sucediendo. Que, de hecho, ha sucedido siempre, solo que ahora, justo en plena pandemia, se está aprovechando la coyuntura para «en el nombre de tal o cual seguridad tuya o mía», es decir, «lo hacemos por ti, pobrecito mío, que no sabes pensar ni decidir bien», poder ejercer un control sobre nosotros, todos, y así tratar de generar una corriente de pensamiento único donde «por tu bien», y a través de todas las plataformas posibles: medios de comunicación, instituciones, sociedades, «te daré la fórmula ideal para que vivas a mi antojo y no seas nunca más libre de pensar y conocer por ti mismo». Si así consiguen eliminar buena parte del pensamiento crítico a la vez que tenernos aturdidos con sus programas anestesiantes de tele y sus leyes coercitivas, tendrán la batalla casi ganada. Dime si crees que da igual, cómo lo ves…¿tenemos que empezar a ser más exigentes con el alimento que ponemos en nuestras mentes y con el propio ejercicio de pensar y discernir por nosotros mismos?. Y para George, claro está, esto iba unido a entender la vida desde un pilar de fortaleza espiritual indestructible que nos ayudara a ser conscientes de este «lavado de cerebro», siendo la ignorancia la bendición más maldita para permanecer donde aquellos que quieren decidir qué podemos o no podemos ver, oir, escuchar o pensar, nos querrían tener. La letra aparece en el vídeo, traducida al castellano, y es una bomba. La música, con esos fragmentos pop seguidos de interludios a lo hindú, incluyendo incluso el mantra Nama Parvathi Pathaye Hara Hara Hara Hara, se convierte en un desgarrador grito para despertar.
Qué decir de George Harrison, talento puro que se hizo un hueco entre la tiranía creativa y, probablemente, de egos de Paul y John, y aún así dejó himnos que forman parte de la historia de la música pop.
Muy buena la aportación de Here comes the moon como espejo del otro tema tan famoso, (lo del Pierrot me encantó) así como mostrar el sentido del humor y la ironía del músico. Sobre My sweet lord, hasta adaptada al castellano la hemos cantado, jeje.
Sobre la última canción que hace referencia al lavado de cerebro, es curioso que tenga tantas referencias a nuestra contemporaneidad. Imagino que así deben ser las grandes canciones, atemporales, porque está claro que vivimos en un mundo donde es fácil ser manipulado sin que nos demos cuenta, y nos creamos una opinión sobre la vida y sus circunstancias que, a lo mejor, parte de ideas preconcebidas, implantadas y no razonadas.
Lo de youtube censurando no me extraña. Ya se abrió la veda inquisidora en Twitter a raíz de los comentarios de Trump y sus locos seguidores. Esto da para reflexionar a cerca de la libertad de expresión y sus límites, y a qué nos conduce eso. Estamos monitorizados por compañías que comercian con nuestras vidas y no sabemos con qué intenciones…
En la censura, como siempre, pagan justos por pecadores.
Hola,Roberto. Gracias por comentar y por los elogios. Es una parte no del todo conocida de George, ese magnífico sentido del humor, que me encanta además que vaya tan unido a su gran espiritualidad y búsqueda interior.
Qué buena apreciación sobre la extrema contemporaneidad de las referencias que trata. Me sorprendió sobre todo lo del teléfono móvil, porque en aquella época, los móviles estaban, como quien dice, comenzando. Creo que ni siquiera tenían conexión a Internet. Un visionario conectado con una especial sabiduría. ¿Así que tú crees que puede haber compañías detrás de la censura incipiente a la que nos enfrentamos? Espero de veras que reaccionemos y que podamos escapar de ella mediante alternativas a las plataformas censuradoras.
Descubrir a George, es un análisis tan grande como el concepto indica. Particularmente, yo he descubierto a través de este artículo etapas de su vida que no sabía o quizás me lo has recordado leyendo tus líneas.
George siempre me ha parecido un artífice importante dentro del grupo Beatles, que no podía manifestar su genialidad hasta la separacion del grupo. A partir de ese momento pudimos y recordamos a un gran compositor y musico.
En cuanto a la libertad de expresión, es verdad que en estos momentos está sesgada por miedos?. Yo creo que es tan inmenso el.poder de comunicacion en la web que se desborda no se puede medir es incontrolable a pesar de que ahora los que quieren controlarlo en un pasado cercano alentaran esa libertad de expresión.
Brainwashed es un canto a la liberdad a quitar vendas mentales. Me ha recordado un film que me encantó, The Wall, dentro de otro espacio en el tiempo.
Sólo queda agradecerte Inmaculada este maravilloso recorrido por la vida de ese gran buscador de sí mismo y que nos transmite su experiencia a través de su música.
Hola, Pilar.¡Gracias por comentar!. Me alegro mucho de que te hayan gustado los vídeos de George y su recorrido vital. Mola mucho, la verdad.Pues creo que sí, que tal vez hay demasiada info en todas partes, la web es un amplificador, y si hay confusión la hace más grande todavía.La paradoja, como dices, es que los que quieren controlarlo todo ahora,impulsaran antes precisamente la libertad de expresión con sus plataformas. La diveridad de ideas y lemas. Igual hay algo por encima y no son ellos.
Respecto a Brainwashed, me ha fascinado leer lo que dices de The Wall de Pink Floyd, pensé exactamente lo mismo cuando la descubrí.Great minds think alike. Sobre todo por la parte de los profesores, ¿verdad? Tendremos que hacer un post sobre ese gran disco-película, todavía me acuerdo cuando nos llevaste a verla con 10 años.¡Qué adeantada a tu tiempo has sido, jajaja! Y era sesión doble, la otra fue Yellow Submarine. Abriendo la mente. Y buscando, como George.
Muy interesante la reflexión sobre la ignorancia. Hoy precisamente me ha llegado por partida doble este mensaje. La otra cita es del monje tibetano Matthieu Ricard: ‘Luego tenemos la ignorancia, es decir, la falta de discernimiento entre lo que debemos alcanzar o evitar para alcanzar la felicidad y escapar del sufrimiento. Aunque Occidente no suela considerar la ignorancia como una emoción, se trata de un factor mental que impide la aprensión lúcida y fiel de la realidad. En tal sentido puede ser considerada como un estado mental que oscurece la sabiduría…’ (sacado del libro Pensar bien, sentirse bien, de Walter Riso).
Hola, Antonio, ¡muchas gracias por tu comentario!
Qué citas y pensamientos más interesantes, me resulta muy enriquecedor leer lo que has escrito sobre la ignorancia, de esos dos grandes autores; por lo que comentas, Walter Riso menciona al monje tibetano Matthieu Ricard. Estoy de acuerdo con la reflexión del monje,y parece ser que en Occidente el velo de la ignorancia puede que esté muy extendido. Demasiado ruido, poco silencio para poder discernir lo que nos lleva al cielo o al infierno.¡Qué alegría leerte!
Qué maravilla de artista, George Harrison, sin duda mi Beatle favorito, igual pq en parte me identifico con él, por su talante silencioso y tranquilo, con mucho menos ego q esos otros grandes genios como John y Paul, y quizás es cierto que tuvo que esperar q que el grupo se disolviera para poder enseñar al mundo su enorme talento, con canciones tan míticas (y misticas), como ese My Sweet Lord, y esa entrañable Here comes the moon 🌜
Desconocía esa faceta cómica y humorística y no sabía q era gran amigo de los Monty Python, pero le pega un montón, muy simpáticas también sus canciones cómicas, en una época, esos maravillosos años 70 y primeros 80, en los que se respiraba un verdadero aire de libertad, que son dos cosas que nos faltan ahora, el aire al respirar 😷 y la libertad 🗽. A cambio tenemos una buena dosis de Brainwashed 🧠😳 jejeje. Muy buen post 😉
Hola, Marco, qué chulo tu comentario, muchas gracias:)
Me alegro de que hayas descubierto esa faceta humorística de George en este post, era la caña, y tan dulce, y tan bonito por dentro y por fuera. Una persona tan espiritual y buscadora. Y es cierto que en los 70 y 80 había algo en el aire que invitaba a experimentar, a crear, a vivir sin cortapisas. Jajaja, me ha gustado tu chiste final, es bueno reírse hasta en los momentos duros. Y te digo más: en Madrid hoy he visto todos los bares llenos de caras sonrientes entablando conversaciones sin máscaras atenazando el rostro, y las calles atestadas de gente, me ha dado la sensación de mucha libertad para el tema que tenemos de colega desde hace un año ya. Madrid debe ser de los reductos de España con más libertad en estos meses.